Lesiones genitales: Enfoque y diagnóstico profesional

Las lesiones genitales afectan tanto al sexo femenino como al masculino. Te contamos qué tipos de lesiones genitales existen y cómo detectarlas a tiempo.

Una de las zonas más sensibles del cuerpo es la de los genitales. Tanto en hombres como en mujeres, los riesgos a heridas en esta zona son elevados, pero su gravedad varía según cada caso. Una lesión genital podría ser consecuencia simplemente de una mala postura en el trabajo, o bien el indicador de que hemos contraído una infección peligrosa.

Para despejar dudas, hemos elaborado este artículo que te permitirá entender qué es una lesión genital, por qué sucede, cuándo es grave y cómo detectarla a tiempo.

¿Qué son las lesiones genitales?

Son lesiones que ocurren en los órganos sexuales, principalmente externos, tanto masculinos cómo femeninos. En ocasiones también incluyen lesiones en la zona del perineo (área entre los muslos de las piernas). Las primeras apariciones de síntomas cómo verrugas, hinchazón, irritación o ardor en la orina pueden ser esenciales para hallar el problema a tiempo.

Que son las lesiones genitales

¿Por qué se producen las lesiones genitales?

Las lesiones genitales pueden producirse por una serie de motivos, el principal: las relaciones sexuales. Las enfermedades de transmisión sexual (ETS), el roce del coito y la falta de higiene en los momentos previos y posteriores suelen ser los principales causantes de estas lesiones.  En mujeres también se puede dar por el ciclo menstrual o la toma de anticonceptivos, mientras que en hombres es frecuente la lesión deportiva o causada por una caída (ya que están más expuestos).

¿Cuáles son los tipos más comunes de lesiones genitales?

En ambos casos, las lesiones más comunes en las zonas genitales suelen estar relacionadas con las enfermedades de transmisión sexual. Desde la gonorrea, la clamidia, el VPH u otras afecciones, en todos los casos la falta de higiene durante las relaciones sexuales, o la falta de prevención suficiente pueden ocasionar este tipo de heridas.

 Lesiones más comunes en genitales masculinos:

En el caso de los hombres, las lesiones genitales más comunes son:

  • Prostatitis: infección en la próstata, que genera dificultad al momento de orinar y sensación fuerte de ardor.
  • Uretritis: Afecta a la uretra y genera una sensación de micción frecuente y la inflamación de ganglios linfáticos en la zona de la entrepierna.
  • Cistitis: es una infección el la zona de la vejiga
  • Herpes genital: Se manifiesta como pequeños grupos de llagas o ampollas, usualmente en el pene o alrededor de este.
  • Balanitis: Es la aparición de pequeños gránulos debajo del prepucio, que suelen generar picazón.

A su vez, aunque menos comunes, se pueden dar casos de gangrena de Fournier en la zona genital, cómo también una infección en un testículo (orquitis) o en el epidídimo (epididimitis).

Lesiones en genitales externos femeninos:

En las mujeres, las lesiones más comunes son las relacionadas con infecciones de la vagina. Las más usuales son:

  • El virus del papiloma humano (VPH): Suele generar verrugas en la zona de la entrepierna y puede derivar en cáncer de cuello uterino.
  • Las úlceras genitales: También conocido como herpes genital, las lesiones ulcerosas genitales suelen aparecer en forma de llagas rojizas y amarronadas que suelen ser extremadamente dolorosas.
  • Infección por hongos: Usualmente suele ser la cándida vaginal, puede causar sequedad y mal olor.
  • La tricomoniasis: Causa ardor e irritación, especialmente al orinar.
  • Otras enfermedades de transmisión sexual: La clamidia y la gonorrea también pueden ser causantes de lesiones genitales y se reconocen por el ardor al orinar.
Lesiones genitales femeninas

¿Cuál es el tratamiento indicado para las lesiones genitales?

La base del tratamiento para lesiones genitales, tanto masculinas como femeninas, es el descanso. Evitar tener relaciones sexuales en el caso de las mujeres permite recuperar el tejido vaginal dañado mientras que en el hombre permite evitar que la inflamación o irritación persista y el continuo roce prolongue estos síntomas.

A su vez, el tratamiento para la mujer involucra evitar lavados vaginales (salvo indicación explícita del médico), y evitar rascar la zona si hubiera comezón. Además, se recomienda utilizar ropa cómoda de algodón. La ropa de nylon o telas sintéticas aportan calor y humedad, lo que favorece a la aparición y posterior expansión de una infección vaginal.

En el caso del hombre, se recomienda aplicar compresas frías durante 15 minutos al menos 3 veces al día para reducir la hinchazón. A su vez se recomienda utilizar calzoncillos jockey con suspensor, para darle soporte a la zona afectada y evitar roces innecesarios que podrían afectar la recuperación.

En ambos casos, pasados los primeros días, de continuar con las molestias se recomienda consultar con un médico especialista, principalmente para descartar la posibilidad de que se trate de infecciones relacionadas a una enfermedad de transmisión sexual.

Conclusión

Las lesiones genitales suelen ser más frecuentes de lo que se espera. Reconocer una afección de este tipo a tiempo va a permitir que la situación no empeore. La recomendación es, una vez reconocemos los síntomas, tomar los cuidados necesarios, y el descanso requerido.

Como una de las causas usuales para este tipo de lesiones suelen ser las enfermedades de transmisión sexual, se recomienda consultar con un experto si los síntomas persisten o empeoran después de unos días.

Si tienes dudas sobre una posible lesión genital, puedes resolver tus preguntas al consultar al Dr. Carlos Iván Basilio de Leo, médico urólogo en CDMX, especialista en diagnósticos y tratamientos médicos, procedimientos y cirugías de última generación para hombres y mujeres.

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